Bendita Agua

La lluvia no deja en paz al pueblo tucumano 

Fuente: La Gaceta

 
  Hay que tener mucho coraje y valentía hoy en día para atreverse a viajar con lluvia, como usted sabe corre el riesgo de no llegar a destino ya que por esta provincia y vecinas abunda el agua no sólo en el cielo sino también en las calles,  nuestra hermosa ciudad de  San Miguel de Tucumán tiene la habilidad  de convertir sus calles en ríos de inmediato cuando llueve, irónicamente nadie está listo para estos ríos de calles,  pero por favor,  ¿no les dijo el gobierno que tienen que tener preparado un bote o una lancha para cuando ocurren estas maravillas? Increíble que hace tantos años nuestra querida  ciudad  cada vez que llueve se viste de agua, las calles se tapan, no se puede transitar, y hasta esas inundaciones se llevan vidas, como fue el caso de Hipólito Antonio Brozoski, de 57 años, oriundo de Santa Cruz, quien hace unos meses atrás murió ahogado bajo el puente Central Córdoba.

  Una vez escuché decir en un festival en El Rodeo de Catamarca que el agua era vida porque aquella noche llovía, ¿y cómo terminó eso?  Provocando un alud y llevándose 15 vidas, destrozando corazones de familias unidas. ¿El agua es vida? ¿Usted cree? Todo en exceso hace mal, y   hasta el agua bendita misma en exceso hace mal,  ¿cómo podemos buscar una solución a esto? ese fenómeno natural tan superior a nosotros pero que es también responsabilidad nuestra, tal vez no podemos evitarlo, no podemos elegir que llueva o deje de llover,  pero quizá pensar una solución  sea desperdiciar tiempo , la respuesta  es hacer algo. 

  Pienso que esto no es algo nuevo, ¿o me dirá usted que la gente de Concepción no está ya acostumbrada a que el agua le llegue a las rodillas?

  Las inundaciones son consecuencias de las precipitaciones excesivas por encima de las medidas normales registradas en la provincia de Tucumán, las intensas lluvias en un tiempo reducido imposibilitan la infiltración por parte del suelo, es decir al caer tanta agua en muy poco tiempo no todo lo que cae es infiltrado,  la tierra se satura  y el excedente escurre por la superficie provocando las grandes crecientes, cuando el nivel de las aguas supera el cauce del río esto genera inundaciones y generalmente las zonas más afectadas son las zonas bajas. 

 Esta gran cantidad de agua también es responsabilidad del hombre por los procesos de deforestación excesiva de los bosques nativos y el uso irracional del suelo, y de los recursos naturales, los árboles son como bombas que absorben el agua del suelo y sin ellos suceden las inundaciones. 

 Por otro lado hay obras hídricas que se postergan año tras año de manera que ni la ciudad ni el campo tiene la infraestructura necesaria para soportar este fenómeno del cual también somos responsables. 

 Para  mitigar este fenómeno hay que actuar de distintos frentes, por un lado generando concientización en el uso de los recursos naturales, un sistema de control efectivo con penalizaciones rigurosas de parte del gobierno,  también promoviendo la reforestación, y como cuarta medida la ejecución de obras hídricas para encauzar  los excedentes de agua. Cuando este conjunto de acciones se realicen, finalmente usted podrá transitar por las calles y rutas con la tranquilidad de no ser alcanzado por el río.