como evitar que el corazón nos tome por sorpresa

Los expertos aseguran que existen  síntomas, que dan a entender que se tiene problemas en el corazón.  Para evitar que un problema del corazon nos tome por sorpresa tenemos que conocer los siguientes síntomas.

1) Ronquidos. "Los ronquidos pueden ser una señal de que padecemos una enfermedad cardíaca”, apunta Erwin. En muchas ocasiones surgen como consecuencia de la apnea del sueño, enfermedad que está asociada con importantes cambios fisiológicos que aumentan el riesgo tanto de sufrir un ataque cardíaco como un accidente cerebrovascular (ACV). Los ronquidos también pueden ser un signo de que se padece una fibrilación auricular, un ritmo cardíaco irregular que afecta directamente a la circulación sanguínea.

2) Pies y piernas hinchados. Si bien estas extremidades suelen hincharse por muchas razones (desde el calor, el sedentarismos, entre otros), también pueden ser la evidencia de alguna insuficiencia cardiaca congestiva, según el experto. Este tipo de hinchazón constante tiene mucho que ver con la falta de aliento en la actividad diaria (o incluso al dormir).

3) Disfunción sexual. Mucha gente piensa que la disfunción eréctil se desarrolla como consecuencia de un problema de los órganos reproductivos o de su propio cerebro, atendiendo a situación mentales de estrés y angustia. Puede ser, pero lo cierto es que en la mayoría de los casos tienen más que ver con problemas arteriales que pueden derivar en importantes problemas cardíacos.

4) Problemas de encías. El dolor, inflación o sangrado de encías estén relacionados con padecer periodontitis, que "puede conducir a un aumento de la inflamación en todo el cuerpo, y el exceso de actividad de las vías inflamatorias se traduce en un importante factor de riesgo para el desarrollo de la enfermedad cardíaca aterosclerótica y los ataques al corazón”.

5) Dolores de hombros y cuello. Por lo general, las personas que experimentan un ataque cardíaco suelen sentir una presión fuerte en el pecho o sensación de opresión en los brazos, pero no son las únicas señales. Muchos enfermos sienten una sensación diferente y poco relacionada con los infartos, como incómodos dolores musculares en cuello, espalda y hombros.

6) Trastorno digestivo y ardor estomacal. La dispepsia (problemas de indigestión) y la pirosis (calor al estómago) pueden indicar problemas. Si a estos síntomas le sumas náuseas, sudoración y dificultad al respirar.